¿Cómo iniciar en el mundo de las mascarillas coreanas?
Empezaré una sección muy ligera de reviews diferentes a cuestiones de libros, mangas o series. En esta ocasión quiero compartirles mi opinión acerca de mascarillas coreanas y cómo sentirte segura acerca de las mascarillas que deseas utilizar.
Desde hace algunos años las rutinas faciales de este país empezaron a emerger en el mercado internacional como una alternativa económica pero útil para consentir la piel. El problema: el mercado se empieza a inundar de mascarillas faciales - tanto buenas y no tan buenas - que por tener un nombre coreano lo compramos sin dudar. Ojalá fuera tan fácil siempre escoger los productos que utilizamos en la piel por la multitud de reacciones no deseadas que nos preocupan y lo poco útiles que pueden ser para resolver nuestros problemas. Es por eso que me gustaría abarcar ciertos puntos al momento de escoger una mascarilla coreana y que no tengas ningún problema, estando satisfecha por tu compra.
No todo lo barato es malo ni todo lo caro es lo mejor.
Igual que muchos productos en el mercado, no necesariamente tienes que comprar lo más caro para asegurar calidad a la hora de comprar una mascarilla. Usualmente podemos encontrar tres gamas de mascarillas:
- Gama baja: mascarillas que rondan los $50-60 MXN por unidad. La hoja es más delgada que las mascarillas de mayor gama y el producto se absorbe más rápido.
- Gama media: mascarillas con un valor de $70-90 MXN por unidad. Suelen tener un plus (hoja de algodón, sin alcohol, esencias naturales, etc.). Queda bastante líquido en el empaque que puedes aplicar después de retirar la mascarilla.
- Gama alta: mascarillas que cuestan $100 MXN o más. No he utilizado una de esta gama pero suelen enfocarse en situaciones específicas para la piel como elasticidad, eliminación de granitos o limpieza profunda. Los ingredientes son más extraños, por así decirlo, y más que para rutina, son de ocasiones especiales.
Si eres principiante, prueba mascarillas de marcas reconocidas en Corea.
Suele ocurrir que en tiendas especializadas en maquillaje o cuidado facial venden mascarillas coreanas pero creemos que todas las marcas son buenas. Hay ocasiones en que tienen un efecto placebo más que nada, realmente no ayudan a la larga a nuestra piel o el efecto es 24hrs y volvemos a lucir igual. Conforme te vas introduciendo al mundo de las mascarillas lo ideal es comenzar con marcas conocidad porque aseguras que es poco probable tener una reacción (como irritación, resequedad, enrojecimiento o sarpullido) y que el efecto al menos te durará una semana. Entre las marcas que he visto que son buenas y recomendadas tanto dentro como fuera de Corea son:
- TONYMOLY
- G9 Skin
- Holika Holika
- Etude House
- Missha
- Dewytree
Prueba con mascarillas de estas marcas antes de aventurarte al terreno desconocido de unas menos populares.
Sugerencias de uso de las mascarillas - la traducción directa.
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Algo que puede resultar abrumador con las mascarillas es escoger el tipo específico de una línea. Por ejemplo, encuentras unas mascarillas de Holika Holika de frutas silvestres y vienen como 6 tipos de mascarillas diferentes y todas parecen que te dicen que funcionan para cosas diferentes de forma confusa; te quedas con cara de confusión porque no sabes cuál deberías escoger para tu tipo de piel. En general las mascarillas tienen 4 propósitos:
- Hidratación: hay mascarillas que explícitamente mencionan que nutren o hidratan la piel. También las que mejoran la apariencia de la piel o mencionan que le dan más brillo entran en esta categoría. Los ingredientes humectan la piel de la cara, disminuyen la resequedad en ciertas áreas; son ideales para pieles mixtas a secas, en invierno, pieles grasas desbalanceadas. Algunos ingredientes que identifican este propósito son: aloe, karité, miel o própolis, acai, pepino, ácido hialurónico, rosa, brócoli, tomate, ginseng.
- Regeneración: este tipo de mascarilla se enfoca en brindar un extra a la piel (amionácidos, vitaminas) para la recuperación de la piel, reafirmación o mejorar su elasticidad. Muchas de las de gama media o alta se enfocan en este propósito. Se sugiere para pieles maduras, para tratamiento o prevención de arrugas, pieles maltratadas por el sol, desvelos o con resequedad. Los ingredientes tradicionales que se utilizan son: caviar, caracol, colágeno, placenta, plátano, EGF.
- Aclarante: tienen como meta disminuir las manchas ocasionadas por el sol o la opacidad de la piel utilizando ingredientes especiales. Son un mix entre regeneración e hidratación, no son tan pesadas, se absorben rápido y la hoja es más o menos delgada. Considero que es para todo tipo de piel - grasa, mixta o seca - y esté o no maltratada. Uno de los riesgos que yo veo es tener una reacción - enrojecimiento o sarpullido - al usarlas. Hay que recordar que si se utilizan las de vitamina C, debes procurar no exponerte al sol. Los ingredientes más usuales de estas mascarillas son: vitamina C, perla, fresa, arroz.
- Reducción de poros y puntos negros: unas de las más populares para faciales donde se busca diminuir los poros y eliminar los puntos negros. Las pieles grasas o con tendencia a acné pueden ser las más benefiadas de estas mascarillas pero en general las pueden utilizar todo tipo de piel. Si se utiliza alguna que tenga algún ácido o alcohol puede resecar la piel, por lo que pieles delicadas o secas tienen que utilizarlas poco. Los ingredientes comunes que tienen estas mascarillas son: cacao, uva, té verde, hoja de té, bambú, ácido salicílico, hidrocoloide, carbón activado.
Rutina para aplicar la mascarilla y no morir en el intento.
Es muy sencillo, aunque al principio puede parecer confuso qué realizar antes, durante y después de aplicarte la mascarilla facial. Los pasos serían los siguientes:
- Lava tu cara con agua templada y con el producto de tu preferencia. Seca tu cara hasta que quede prácticamente seca.
- (Opcional) Aplica un tóner o suero en todo tu rostro.
- Abre la mascarilla y colócala en tu rostro. Debe cubrirlo todo. Hay mascarillas que tienen las medidas un poco extrañas, por lo que no sientas raro si el espacio de la nariz, ojos o boca es pequeño. Pega por completo la mascarilla a tu cara, evita que quede cabello atrapado para que no sea molesto. No tires el empaque ya que normalmente tienen producto líquido todavía.
- Dependiendo de la mascarilla, déjala actuar por 10, 20 o 30 minutos.
- Retira la mascarilla.
- Utiliza el líquido que haya quedado en el empaque de la mascarilla. Aplícalo con toques suaves en toda tu cara y cuello hasta que se absorba por completo.
Lo ideal es que la apliques en la noche para que durante el sueño se absorba por completo el restante de la mascarilla. Al día siguiente puedes lavar tu cara de forma normal y aplicar la crema que usualmente utilizas. Evalúa los resultados durante ese día y durante la misma semana para saber si el efecto permaneció o sólo duró para un día.
Prioriza los aromas que te agradan.
A pesar de que hay una variedad inmesa de aromas para las mascarillas, no utilices las extrañas al inicio por el efecto que tienen, en ocasiones el olor no puede ser tan agradable para ti y te lleves una mala experiencia. Empieza por aromas familares (como miel, chocolate, aloe, fresa, uva) y después explora mascarillas más "pro", como las de colágeno, caracol, leche, ginseng, etc. Así irás armando tu paquete ideal de mascarillas que cubran tus necesidades y deleiten tu sentido del olfato.
Finalmente, la mejor mascarilla es la que sientas que hace lo que debe y te agrade su aroma y textura que deja en tu piel. No pagues mucho por una mascarilla que puede oler extraño y que no le haga nada a tu piel por buscar algo de calidad o extremo. Las mascarillas faciales deben ser divertidas y sentirlas cómodas. Explora, comenta con tus amigas que ya han usado alguna, busca reseñas en varios sitios de las mascarillas, compara si tienen el mismo tipo de piel que tú y elige la que creas que te gustará más. Tal vez no siempre aciertes pero irás conociendo las que mejor se adaptan a tu piel.
