Es un problema común de lectores, se los puedo asegurar. Pero, ¿cómo comienza este mal? Es algo simple pero complicado de identificar, apareciendo cuando tu obsesión de libros ya tiene algunos años.

Una de las preguntas más difíciles que le pueden hacer a un lector consumado es: ¿Cuál es tu libro favorito? Esa pregunta sencillamente no la puedes hacer porque entramos en un conflicto donde nuestra ardilla interna (cerebro) arde en desesperación, buscando en los archivos cuál fue nuestro libro favorito. Pero libro favorito engloba diferentes criterios para identificarlo: ¿género?, ¿autor?, ¿de algún año en específico?, ¿con ilustraciones?, etc. Con todo esto, por esta vez, digamos que ya encontraste tu libro favorito.

Un libro favorito es el que puedes releer cuantas veces quieras en el año, mes o día sin que te parezca aburrido. Un libro favorito es del que guardas buenos recuerdos (infancia, adolescencia, trabajo, escuela, entre otras cosas) y comenzar a leer las primeras palabras de la primer hoja saben a bienestar. ¿Ya sabes más o menos cuál es tu libro favorito? Bien.

Resulta que un día vas tranquilamente a la librería a "ver las novedades" (nah, vas porque SIEMPRE es agradable entrar a una librería), y encuentras que X editorial sacó una versión de tu libro favorito con una fabulosa portada, no es caro y traes dinero en el bolsillo. COMPRA SEGURA. Ok, tienes dos libros repetidos (?), tu primera versión de ese libro y, ahora, la que has comprado. Después, pasando un poco de tiempo, checando tus redes sociales, te enteras de que están vendiendo una versión de tu libro favorito en PASTA DURA, algo caro sí, pero sabes que vale la pena. PUM, COMPRA SEGURA. Ahora ya tienes 3 versiones del mismo libro. Tu mamá/papá empieza a sospechar y sale la pregunta: "¿No tienes ya X libro repetido?", "Sé que te gusta esa historia pero ¿no es mucho tener n libros de lo mismo?". Caes en la cuenta de que es cierto, con el dinero con el que has comprado esas dos ediciones podías haber comprado un libro nuevo.

Ya estás en recuperación lectora, controlándote mentalmente para ya no comprar más copias del mismo libro. Entras a una página de X librería a buscar novedades de ese autor y, ¡oh sorpresa!, resulta que tendrán una nueva versión del libro que amas con "algo inédito", una portada "deslumbrante", ¿ilutraciones, tal vez?, más grande, más pequeño, con un color distinto, con un olor distinto, etc. LO QUIERES, LO QUIERES, LO QUIERES. Echas una mirada a tu bolsillo, ¿me alcanzará para esa versión (FACT: mientras más versiones del libro tienes, más cara te sale la siguiente)?. En lo que tienes esa discusión y planificación interna (FACT 2: los lectores son personas muy organizadas en sus finanzas, un poco más/menos de dinero puede hacer la diferencia entre tener un libro y no tenerlo), resulta que te alcanza, no piensas y, por instinto, lo compras. He perdido la cuenta de las versiones que tienes de tu libro favorito.

Esta sensación es difícil, nos pone entre la espada y la pared, pero cuando tienes o llega el libro que tanto anhelaste todo se disipa, eres feliz, ya nada importa.

Sí, los lectores de años podemos empezar a desarrollar esta conducta. ¿Es mala? Lo dejo a su parecer, finalmente es nuestro dinero el que gastamos, pero siempre debemos de valorar si nos conviene o mejor lo dejamos para ocasiones especiales (llámese cumpleaños o navidad). Si eres un lector y has identificado que con X libro te llega a suceder... ¡Bienvenido al club! No eres el único y, además, tienes merito por identificarlo.

¿Cuál es tu libro favorito? ¿Cuántas versiones tienes de tu libro favorito? ¿Estás en contra de esta conducta o ya eres todo un profesional dominándola? ¡Espero sus comentarios!